domingo, 12 de octubre de 2008

Supertramp "Even In The Quietest Moments" (1977)


Voy a empezar lanzando el órdago: Supertramp son diez veces mejores que Boston. Ahora que a todo Dios (bueno, desde hace unos añitos ya) le ha dado por reivindicar a estos últimos, que siempre me han parecido una medianía (si, incluida su "More than a feeling"). ¿Por que comparo a ambos grupos? Bueno, principalmente por que me da gana y no es una comparación más ridícula que muchas otras que se consideran acertadas y corretean desde hace decadas por la prensa musical. Y por que ambas formaciones hacen un rock comercialote y apañado. En el caso de los Super más cercano al rock progresivo. A todos los fanes de los Super que conozco les gustan tambien Pink Floyd. Dicho así parece que conozca legiones, en realidad son dos: mi hermano Pedro Pablo y amigo Nacho. Aunque también ambos tienen discos de King Crimson y Tangerine Dream y no se me ha ocurrido buscar esas otras conexiones entre grupos. En fin, que más dará. Si los Pink Floyd de Syd Barret tiraban de los Beatles más psicodelicos y costumbristas, Supertramp toman de los más comercialotes del periodo posterior al "Sgt. Peppers". Y no en vano, en este disco el ingeniero de sonido es Geoff Emerick que habia participado en la grabación de los mejores discos de los Beatles.

El contenido del disco esta reflejado en esa chocante portada que muestra un piano cubierto de nieve sobre una colina: elegante pero con un punto absurdo, divertido pero con algo de oscuridad. La encargada de abrir el álbum es la canción más inmediata de este, "Give a little bit". Una muestra de pop perfecto conducida por la voz de Roger Hodgson, de tan voz aguda como la del mismo Brian Wilson (aunque menos emotiva) y el cristalino sonido de una guitarra acustica de 12 cuerdas (como la de Roger McGuinn). Prosigue "Lover boy", cantada por Rick Davies, que refleja las influencias de los Beatles y Kinks más cabareteros, con Hodgson a los sintes y haciendo unas segundas voces agudisimas, como si fuera un payaso (por los tintes cabareteros de la canción) enchufado de helio. La canción que titula el disco es una plácida y relajada balada, al menos al inicio, ya que va adquiriendo tintes épicos a la vez que Hodgson pasa de los registros graves de su voz a los más chillones. Y tiene unos coros que parecen salir de un disco de músicas del mundo, hasta volver a un placido final. Casí podria entrar en el "III" de los Zeppelin o en la más atmosferica cara B del "Zoso" y la voz de Roger es aquí muy similar a la del Dios Plant. Rick Davies da la replica a su compañero Hodgson que muestra unas influencias más pop, con sus querencias por el blues y el jazz en la preciosa "Downstream", donde solo suenan su voz y su piano. Tambien demuestra que pese a no poseer una voz capaz de alcanzar los agudos imposibles de Roger, puede resultar tan emotivo o más que este. Una tremula emoción recorre su voz durante toda esta magnifica canción, mi favorita del disco, junto a "From now on" (tambien de Davies).

"Babaji" es un himno religioso de Roger (que estaba redescubriendo el cristianismo en estos momentos) y muestra la cara más empalagosa de los Supertramp, siendo lo menos destacable del album. Pero aqui vuelve Davies al rescate con la fenomenal "From now on". Tras un inicio a lo blues con piano muy caracteristico de Davies, tiene un puente instrumental donde se añade un acordeon. Davies vuelve al leit motiv de piano del inicio, un saxo colorea y comienza la parte gospel repitiendo el estribillo "Guess I´ll always have to be/ Living in a fantasy/ That´s the way its got to be/From now on" junto a un conjunto de gospel. Y para acabar la más ambicionsa "Fool´s overture" donde se trata de reflejar el horror humano tomando como ejemplo la II Guerra Mundial (la cancion incluye un sampleado de un discurso de Churchill y una cita al "The fool on the hill" de los Beatles). Quiza ha envejecido algo mal esta larga suite de once minutos, con momentos brillantes y otros algo ridiculos (ese efecto de bateria sintetizada o esos coros a lo opereta), aunque me encanta la orquestacion final que parece una parodia malefica de esas bandas que recibian a los heroes de la guerra en los puertos britanicos al final de la contienda.

ENLACE DE DESCARGA:
http://rapidshare.com/files/78222946/SupertrampEver.rar

2 comentarios:

Bruno Ysla Heredia dijo...

Todo muy bonito hasta que aparece el nombre de Brian Wilson... ¡Agh, agh! Acepto que el tipo haya hecho dos de mis canciones favoritas y más pero esto de que es la quintaesencia de todas las quintaesencias o de que cada vez que se hable de algo bonito se le tenga que mencionar pues...

Claro que me gusta Supertramp, su música es muy curiosa porque a pesar de ese o esos falsetto(s) que podrían remitirme a algo muy luminoso más bien los siento oscuros, como de atardecer pero no de esos bonitos de verano sino de otoño o de invierno. Algo así como lo que dices de la portada de este disco. Supongo que en parte es lo que me gusta de ellos (cuando lo hacen bien): Su música es bonita pero no es simplemente eso. Aunque simplemente podría decir que me gustan y nada más... (puedo escuchar "It's rainning again" varias veces seguidas)

saludos

Viejotrueno dijo...

la conexión supertramp-beach boys me parece más agudizada que la conexión supertramp-beatles. Quiero decir, a partir del crime of the century, claro.

Yo también suelo preferir el material de Rick Davies, y Downstream es una canción increíble, sí.